Pero es que yo soy así, y dudo que algo me cambie.

Puede que no sea el mejor ejemplo a seguir, y que no de los mejores consejos, que muchas veces sea demasiado cabezota, pesada, o demasiado pasota, o demasiado imbécil. Puede que no sea la mejor persona del mundo, ni la más guapa, ni la más fea. Puede que a veces me lance antes de tiempo, o demasiado tarde. Puede que tenga un pronto que me hace saltar a la mínima, o que al contrario, cuando tengo que saltar, mi pronto decide que no, que no salte. Puede que creas que voy todo el día fumada, porque me río de la mayoría de las cosas. Puede que tenga más peluches ahora que cuando era pequeña, que siga agarrándome a ese peluche tan grande cuando lloro, que sea como una niña pequeña.
Puede que diga un "te quiero" demasiado rápido, pero si lo digo es porque lo siento, o también un "te odio". Puede que sí, que me cueste callarme en ciertas ocasiones, pero tengo que decir lo que pienso.
Puede que haya gente que me odie, y gente que me adore.